El Poder Compuesto de la Consistencia
La diferencia entre estudiar esporádicamente y mantener una rutina diaria es exponencial. Nuestros datos muestran que estudiantes que siguen un horario consistente durante 90 días desarrollan una base sólida que perdura años.
Recuerda que formar hábitos sólidos requiere paciencia. Los primeros días serán difíciles, pero alrededor del día 21 notarás que estudiar se vuelve automático. La clave está en comenzar con expectativas realistas y aumentar gradualmente la intensidad.